La primera va asociada a un sitio que hemos visitado hace poco, y que nos ha dejado un gran sabor de boca, por su belleza, por lo sorprendente del lugar, y porque nos hemos encontrado un autentico filón para la fotografía de "baja velocidad".
En este caso, el monasterio de Piedra (llamado así porque pasa el rio Piedra), nos permite sacar fotografías de multitud de cascadas, obteniendo el llamado "efecto seda" en el agua. Este efecto se consigue cuando el agua cae a alta velocidad, y utilizamos velocidades de obturación bajas (depende de la caída del agua, más o menos velocidad).
Sin más, unas cuantas fotos de este precioso lugar.
Unas cascadas que se encuentran en el comienzo del recorrido.
La famosa cascada "Cola de Caballo" (se ve tanto por la parte de dentro como por la de fuera)
En fin, un bonito lugar para poder visitar
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